EL CODIGO DEL MOTERO

Voy en moto única, y exclusivamente, porque es divertido.

Voy en moto porque disfruto de la libertad que siento al estar expuesto a los elementos, y ser vulnerable al riesgo que esta intrínseco a ir en moto.

Es decir que no monto porque esté de moda.

Conduzco mi maquina, no me la pongo. Mi maquina no es un símbolo de status. Existe simplemente para mí, y solo para mí. Mi maquina no es un juguete, es una extensión de mi mismo, y la trato en consecuencia con el mismo respeto que tengo a mi mismo.

Me esfuerzo por comprender el funcionamiento interno de mi maquina, desde lo mas básico a lo más complejo. Aprenderé todo lo que pueda sobre mi máquina para así mantenernos a salvo los dos. Yo soy el dueño y ella está a mis órdenes. Trabajando juntos en armonía seremos un equipo invencible.

No temo la muerte. Sin embargo, hare todo lo posible para evitar que llegue pronto. El miedo es el enemigo, no la muerte. El miedo en la carretera lleva a la muerte, por eso no me dejare atemorizar, seré mi dueño. Lo dominare.

Mis maquinas me sobrevivirán, por eso son mi legado. Las cuidare para futuros moteros que las aprecien como yo las he apreciado, cualesquiera que puedan ser.

No monto en moto para ganar atención, respeto o dar miedo a nadie que no ande en moto, ni tampoco deseo intimidar a ninguno de ellos. Para aquellos que no quieren conocerme, todo lo que deseo es que me ignoren. Para los que deseen conocerme, compartiré con ellos la verdad de mi mismo, para que puedan comprenderme y no temer a otros como yo.

Nunca seré un agresor en la carretera, sin embargo, si alguien se mete conmigo, su agresión será respondida de la manera más fuerte que pueda.

Mostrare respeto hacia otros moteros más experimentados y conocedores que yo. Aprenderé de ellos lo que pueda.

No mostrare desprecio hacia otros moteros menos experimentados y conocedores que yo. Les enseñare lo que pueda.

Sera mi tarea ser mentor de nuevos moteros, que deseen introducirse en el modo de vida motero, para que la casta continúe. Les enseñare como a mí me han enseñado otros antes. Preservare el honor y las tradiciones de moteros anteriores a mí, y las pasare sin alterarlas.

No juzgare a otros moteros por la maquina que elijan, su apariencia o su profesión. Les juzgaré, únicamente, por su conducta como motero. Estoy orgulloso de mis obligaciones como motero, aunque no se las hare cumplir a otros. Si preguntan, las compartiré con ellos.

Estaré dispuesto a ayudar a cualquier motero que realmente necesite mi ayuda. Nunca pediré a otro motero que haga lo que puedo hacer por mí mismo.

Yo no soy un motero de fin de semana. Soy un motero cuando y donde voy. Estoy orgulloso de ser un motero y no escondo mi modo de vida a nadie.

Monto en moto porque amo la libertad, la independencia y el movimiento del suelo bajo mis pies. Pero sobre todo, monto para conocerme mejor a mí mismo, mi maquina, las tierras por las que voy, y para buscar y conocer otros moteros como yo.